viernes, 22 de junio de 2012

La Crónica: Alemania saca a relucir su potencial ofensivo ante una encerrada Grecia


Foto: marca.com
Era difícil para Grecia. Llegaba con la baja por sanción de un hombre tan importante en su clasificación para cuartos como es Karagounis, y ante una de las máximas favoritas. Salió con un once ultradefensivo con tres centrales (Papadopoulos, Papastathopoulos y Tzavellas), con dos carrileros (Torosidis y Makos) para abrir al equipo en las contras, y con un islote, Samaras, que luchaba por cada balón que traspasaba el medio del campo. Por parte de Alemania, Reus sustituía a Müller, Schürrle a Podolski y Klose a Mario Gómez.

El objetivo de Grecia era claro: aguantar el chaparrón y salir como pudiese. Y en cierto modo el plan iba cumpliéndose, con alguna que otra llegada con peligro de Alemania, con un Khedira excepcional, dominando el mediocampo a su antojo, hasta que, en el minuto 39, el balón le llega a Philipp Lahm que no se la piensa y lanza un trallazo desde fuera del área que entra como un fusil en la portería, si bien Sifakis podía hacer mucho más.

Fernando Santos reajustó alguna pieza en el descanso y metió a Gekas por Ninis. El balón y las ocasiones seguían siendo alemanas pero los helénicos se iban soltando cada vez más. Así, en un fallo de concentración alemán, Katsouranis mete un balón en profundidad a la banda derecha donde se encuentra Salpingidis, que observa cómo Samaras se mete entre Boateng y Hummels, poniendo un centro para el remate del delantero. 

Saltaban las sorpresas. Pero en el 61, seis minutos después, en una jugada en la que los bávaros fueron moviendo el balón de un lado a otro, hasta que Boateng le sirve un centro a Khedira que revienta el balón en la portería de Sifakis. Imparable.El recital de goles y ocasiones continuaba, y Klose y Reus, en el 68 y 74 respectivamente, aumentaban la ventaja con una mala actuación del portero griego.
Foto: AFP

Llegando al final, con los alemanes ya pensando en semifinales, Salpingidis mete un centro al área que rebota en el brazo de Boateng. El propio Salpingidis se encargaba de recortar diferencias, gol que cerraría el partido con un severo 4-2.

Alemania ya espera rival en semifinales. Éste saldrá del duelo entre Inglaterra e Italia, que sin duda pondrá en mayor aprietos al combinado alemán de los que tuvo contra Grecia.

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